Es un hecho históricamente admitido que el nacimiento del Estado moderno se hizo en el conjunto geográfico europeo, por eso, considerando esta especificidad se puede plantear la cuestión de su origen. ¿Por qué el Estado moderno surgió solamente a Europa? El Estado dicho moderno es lo que definiríamos como el Estado hoy, si se lo cree innato, es en realidad el resultad de un largo proceso histórico que lo diferencia de las organizaciones anteriormente existentes. Se podría definir el Estado moderno como un conjunto geográfico y demográfico que se dota con fuertes instituciones para su administración. Estas instituciones deben ser impersonales, duraderas en el tiempo con el fin de permitir una especialización política y una aceptación social de su autoridad. Finalmente el Estado se convierte finalmente en un Estado realmente moderno cuando se dota de la soberanía y que se asiste más tarde a una descentralización del poder. Europa como lugar de aparición es aquí un conjunto geográfico amplio que se podría extender a Rusia, pero una atención más especial debe referir a Europa Occidental en consideración de su papel prominente en el proceso.
[...] Porqué el Estado moderno surgió sólo en Europa? Es un hecho históricamente admitido que el nacimiento del Estado moderno se hizo en el conjunto geográfico europeo, por eso, considerando esta especificidad se puede plantear la cuestión de su origen. ¿Por qué el Estado moderno surgió solamente a Europa? El Estado dicho moderno es lo que definiríamos como el Estado hoy, si se lo cree innato, es en realidad el resultad de un largo proceso histórico que lo diferencia de las organizaciones anteriormente existentes. [...]
[...] La Iglesia es un Estado antes de la hora, tiene un derecho propio, recursos propios, un poder centralizado y jerarquizado, una administración y en consecuencia instituciones perennes e impersonales, el poder político concedido a los soberanos no es más que una delegación. Así pues, la organización de las instituciones temporales debe muchos al poder espiritual. La introducción del derecho romano permite una diferenciación del derecho civil y el derecho penal en un objetivo de reglamento de las relaciones familiares y comerciales con, en particular, la introducción de la propiedad privada que señala el desarrollo de verdaderas instituciones judiciales en el Estado que el Rey se siente en el deber hacer respetar. [...]
[...] La implicación de esta reorganización es la aparición de administradores como ministros o secretarios delegados a la economía o también al establecimiento de relaciones internacionales. Así pues, la principal consecuencia de estos cambios económicos es por supuesto un refuerzo de las instituciones oficiales y una administración racionalizada de los asuntos económicos como políticos. Sin embargo, si estos funcionarios existen, no son independientes y permanecen bajo la influencia de un poder muy centralizado. Las preocupaciones del Rey, por lo tanto del Estado de promover el “bienestar social” en su nombre, le llevan a ser más afectado por la administración local de su población. [...]
[...] La relativa estabilidad aportada por estos cambios institucionales de importancia tiene consecuencias importantes sobre el desarrollo del Estado moderno por el nacimiento de nuevos movimientos económicos y en consecuencia sociales. La estabilidad institucional y el establecimiento de una justicia escrita y no completamente arbitraria permite una explosión del comercio que participa por supuesto del enriquecimiento global de la población, de la aceptación del objetivo de “bienestar” que debe promover el Rey, pero también y sobre todo de la aparición de nuevas clases sociales de comerciantes, más bien urbanos emergentes pues en la configuración del poder. Este desarrollo de la creación de riquezas tiene un impacto sobre las instituciones oficiales. [...]
[...] A continuación, los Secretariados en los asuntos exteriores y militares tomaron el relevo, dando una verdadera consistencia al Estado como tal y no simple propiedad del Rey. Estos puestos independientes deben su creación y su necesidad a la importancia creciente del comercio internacional y en consecuencia de los acuerdos que regulan las relaciones entre Estados, de ahí la importancia de un ejército permanente antes accesorio. La descentralización del poder se hace lentamente, por medio de las instituciones, y también con la aparición de una élite económica que se beneficia de una transferencia de poder por los endeudamientos oficiales. [...]
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