Esta semana, he decido concentrarme en un artículo publicado en el sitio web del periódico ABC el 24 de marzo de 2010, escrito por Carmen Muñoz y intitulado “Ola de detenciones en Cuba tras la muerte en la cárcel de un disidente”. Esta elección fue motivada por varios motivos. Me llamó la atención, primero, la situación actual de Cuba que se destaca por un auge de la visibilidad de la oposición al castrismo en un periodo de incertidumbre para el régimen: los problemas de salud de Fidel Castro parecen debilitar el sistema político que ha construido aunque su hermano trata de “mantenerle”.
Desde la muerte de Orlando Zapata, tratada en mi artículo, cuatro disidentes cubanos y un periodista, Guillermo Fariñas, ha empezado una huelga de hambre. El caso de Fariñas es muy interesante porque muestra que un periodista puede comprometerse directamente en la política para defender su visión del interés general pero también, y quizás sobre todo, porque no es su primera acción de disidencia.
[...] A juicio del presidente de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (Ccdhrn), el régimen de los hermanos Castro pretendía que los restos mortales de Orlando Zapata lleguen al municipio de Banes (provincia de Holguín) con el tiempo justo para el entierro, para evitar cualquier tipo de manifestación de dolor o de disidencia. La casa de la madre del disidente, situada en la calle del Embarcadero número del reparto Mariana Grajales de Banes, se encuentra fuertemente custodiada por las fuerzas de seguridad del Estado y la Policía, según relató a ABC la periodista independiente Caridad Caballero Batista. Su casa de Holguín unos 80 kilómetros de Banes) también permanece vigilada desde ayer por la tarde. Reina Luisa Tamayo Danger, la madre del opositor fallecido, estaba ilocalizable incluso por el teléfono móvil. [...]
[...] Hay, primero, un problema de precisión: la información sobre la disidencia cubana es ya muy difícil a obtener el terreno”, es decir en Cuba, y comprendemos que eso es aún más complicado desde España. La periodista escribe que hay “muchos otros (disidentes) que se les impide salir de sus domicilios” sin precisar ninguna cifra. Afirma además que detenciones de opositores ya se elevan a (información puesta en negrita para insistir en ella) sin aludir a la fuente de información que permite aseverar eso. Hay, segundo, desde mi punto de vista, un problema de “parcialidad” de las fuentes. [...]
[...] El periodista cita explícitamente “fuentes de la disidencia interna” sin dar la palabra al régimen castrita. Mi meta no es denegar la importancia de la represión que conoce Cuba actualmente sino de afirmar que se debería citar las declaraciones de cada una de la partes en cuestión para asegurar una cierta “igualdad de trato” y dejar el lector forjar su propia opinión. Vemos entonces con este artículo que la cubertura mediática de la represión política en un país dado parece ser muy complicada y eso por dos razones: la escasez y la parcialidad de las fuentes disponibles por un lado y la propia opinión del periodista por otro lado que puede difícilmente estar muy objetivo frente a problemas de esta naturaleza. [...]
[...] La relación entre el periodismo español y el régimen cubano a través de un artículo de prensa Esta semana, he decido concentrarme en un artículo publicado en el sitio web del periódico ABC el 24 de marzo de 2010, escrito por Carmen Muñoz y intitulado de detenciones en Cuba tras la muerte en la cárcel de un disidente”. Esta elección fue motivada por varios motivos. Me llamó la atención, primero, la situación actual de Cuba que se destaca por un auge de la visibilidad de la oposición al castrismo en un periodo de incertidumbre para el régimen: los problemas de salud de Fidel Castro parecen debilitar el sistema político que ha construido aunque su hermano trata de “mantenerle”. [...]
[...] Alude, en esta óptica, a un “secuestro” de cadáver remitiendo a una trasgresión de la propia dignidad humana que debe chocar al lector. Da, además, directamente la palabra a la madre de Zapata aunque sabemos que los “testimonios calientes” de personas victimas están muy influenciado por el dolor entonces, poco objetivos. La meta del artículo aparece claramente en su última frase; frase que, por su posición, va a llamar forzosamente la atención del lector. El periodista “utiliza” así una declaración de la madre de Zapara que “exija la liberación de los demás presos políticos encarcelados injustamente para que no se repita lo sucedido a su hijo” para expresar indirectamente su punto de vista. [...]
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