Mónica Ceberio Belaza, ETA, terrorisme, Emiliano Revilla, Urrusolo Sistiaga, espagnol
Ce document est un article de Mónica Ceberio Belaza, paru dans le journal El Pais en 2012, sur le thème des rencontres carcérales entre des membres de l'ETA et leurs victimes.
Il s'agit de répondre à des questions de compréhension du texte, puis d'imaginer un dialogue en rapport avec le thème de l'article.
[...] REVILLA: El pueblo vasco busca el diálogo, la paz... vosotros no podéis hablar por todo el pueblo. ETA: Pero puedo hablar por mí mismo y por mi grupo, así que te pido, te pedimos, disculpas. No deberías de haber pasado lo que has pasado. Espero que logres perdonarme algún día. REVILLA: Ya lo he hecho. Si no, no estaría aquí. Pero no deseo tu libertad. No la mereces. Adios. [...]
[...] ETA: Al final no lo hemos conseguido y los altos cargos estamos decidiendo si hacer un alto el fuego, meternos más en política y por ahí negociar con el estado español. REVILLA: No se cual es vuestro camino, pero las armas, la violencia, el temor y los atentados con coches bomba en frente de cuarteles de la guardia civil no es forma de buscar nada. Así no se logra el independentismo. ETA: Ya sabes, tu piensas de una forma, el pueblo vasco de otra. [...]
[...] Cara a cara entre Revilla y Urrusolo Sistiaga en la cárcel de Nanclares - Mónica Ceberio Belaza (2012) - Rencontres en prison entre victimes et membres de l'ETA Comprensión El empresario Emiliano Revilla se mantuvo en todo momento sereno, como él decía, era duro como acero. Su lucha no fue tanto física como mental. Para mantenerse activo realizó lo que muchos psicólogos llaman "distracción disociativa". En el tiempo que tuvo que estar encerrado en el zulo tuvo tiempo para pensar como irían a matarlo, como lo torturarían, como lo acobardarían para que hiciera cualquier cosa que la banda terrorista ETA pidiera. [...]
[...] Ha pasado mucho tiempo y desearía pedirte disculpas, aunque sabes que en todo momento no te faltó comida ni ninguna comodidad REVILLA: Que no me faltó... sabes que perdí 40 kilos, ¿verdad? Me encerrasteis en un lugar sin luz, sin estímulos visuales ni auditivos y lo peor, sin esperanzas ETA: No te lo tomes como algo personal, sabes que has sido tu como podría haber sido alguien de los objetivos que teníamos en la lista durante años REVILLA: Si, pero fui yo. [...]
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