Estereótipos, espagnol, sociedad, tradiciones, discriminación
Los estereótipos de género están presentes en la vida cotidiana de todas las personas, sean hombres o mujeres. Están presentes en las tradiciones, en las publicidades, etc. Los adolescentes son los más vulnerables a todas las informaciones de los estereótipos de género. Todo esto influencia su desarrollo sicológico, social y cultural.
[...] Los adolescentes son los más vulnerables a todas las informaciones de los estereótipos de género. Todo esto influencia su desarrollo sicológico, social y cultural. Los jóvenes y todas las personas de la sociedad tienen que desarrollar su espíritu crítico hacia todas las imágenes y mentalidades que nos influencian. ¿Cúales son los estereótipos de género? Son las actitudes que diferencian una mujer de un hombre. Por ejemplo, las mujeres están caracterizadas dulces, afectuosas, sensibles, frágiles, tolerantes. Los hombres a su vez se caracterizan por ser ambiciosos, duros, agresivos, activos y valientes. [...]
[...] Tenemos también que despertar las conciencias de nuestro entorno. Si vemos o oímos amistades o familiares que actúen de forma discriminativa, es nuestro deber sensibilizarlos y no tengamos miedo de explicarlos que su actitud no es correcta. Igualmente, las instituciones escolares tienen que apoyar este cambio, y la lucha debe avanzar en el lugar laboral. Todavía las mujeres cobran menos que los hombres con semejante trabajo. Podemos entonces ver que nuestra sociedad y nuestra cultura influencian los comportamientos de los hombres y de las mujeres. [...]
[...] Todos tenemos que contribuir en este cambio, por ejemplo parando de reírnos de las bromas sexistas, así como evitando las obras, sean literarias, musicales, de cine, o vídeojuegos, y las marcas que participan en disciminar un individuo según su sexo. Por ejemplo, las marcas de perfumes alimentan la idea de la mujer-objecto. Dolce & Gabbana hizo un anuncio en cual la mujer era un objeto sexual de varios hombres. Las mujeres en la publicidad está reducida sea a ser un símbolo y un objeto sexual, o una empleada de casa. Estamos en 2019, y todavía alimentamos esta imagen de la mujer al comprar estos productos. Lo anormal se vuelve normal. [...]
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