Los reyes espanoles y sus privados : los espejos del valido

Résumé du document

[...] La definición del privado que ofrece Maldonado y la presentación de esta figura como necesaria ayuda para el rey hace del Tratado del Perfecto Privado una obra clave porque utiliza conceptos y teorias que habrian de ayudar a justificar el papel politica del privado sin necesidad de readaptar los principios conocidos sobre el poder y la soberania del monarca. En efecto, Antonio Feros explica que estos conceptos « cierta manera de igualdad », « amor y perfecta amistad » cito, « aparecieron como el verdadero fundamento, un teoría de legitimización del favorito y de su papel político ». Simplemente, porque al presentar al favorito como amigo del rey, Maldonado lo equipara con un « otro yo », el alma gemela del rey, con lo cual éste no puede ser un peligro para la posición de preeminencia del rey y del sistema monárquico. Quizás esto puede explicar por qué nunca fue pública su obra. En vez de legitimar públicamente la figura del valido, también hubiera podido reforzar las oposiciones.

[...] La definición del privado que ofrece Maldonado y la presentación de esta figura como necesaria ayuda para el rey hace del Tratado del Perfecto Privado una obra clave porque utiliza conceptos y teorias que habrian de ayudar a justificar el papel politica del privado sin necesidad de readaptar los principios conocidos sobre el poder y la soberania del monarca. En efecto, Antonio Feros explica que estos conceptos « cierta manera de igualdad », « amor y perfecta amistad » cito, « aparecieron como el verdadero fundamento, un teoría de legitimización del favorito y de su papel político ». Simplemente, porque al presentar al favorito como amigo del rey, Maldonado lo equipara con un « otro yo », el alma gemela del rey, con lo cual éste no puede ser un peligro para la posición de preeminencia del rey y del sistema monárquico. Quizás esto puede explicar por qué nunca fue pública su obra. En vez de legitimar públicamente la figura del valido, también hubiera podido reforzar las oposiciones.

[...] Antonio de Guevara, en Aviso de privados y doctrina de cortesanos, ya pensaba que cualquier privado del príncipe podía ser bueno a ojos de Dios y de los hombres. Y así le proporcionaba al valido consejos e ideas que le eran provechosas. Por ejemplo, que sea modesto y no presuntuoso, que no tenga vicio público, que trabaje mucho e intrigue poco y por fin que sea generoso y nada codicioso. Estas cualidades, virtudes se encuentran también en el Tratado del Perfecto Privado en los capítulos quinto, sexto y octavo ordenadas en función de 3 grandes entidades:
- Primero: Al rey, el perfecto privado le debe ante todo fidelidad. El buen privado es aquel que conoce perfectamente su trabajo y lo pone en práctica con prudencia. Debe cito: « Armarle sin idolatría, dejando el amor interesado. » La idolatría aparece como un pecado. (...)

Extraits

[...] Sea cual sea la razón de la no publicación del tratado, queda evidente la posición de Pedro de Maldonado: la presencia del favorito es necesaria, éste representa la luna que ayudara al sol, al monarca a brillar aun más. Pero, para ello, se ha de tratar de un perfecto privado. En que reside entonces para el autor esta perfección? O para retomar el titulo de una famosa comedia de Quevedo : Como ha de ser el privado este perfecto privado idealizado por Maldonado. II. Como ha de ser el perfecto Privado A. [...]

[...] Encontramos numerosos ecos de todas estas virtudes que ha de tener el perfecto privado en los tratados de finales del siglo 17. Por ejemplo, según Pérez: Ha de ser muy trabajador: dar audiencias, hacer mercedes, contentar a la plebe, tener muchos ministros pequeños, cuidar de no indisponerse con los grandes. Mendoza por su parte, recomendara que tenga paciencia y no demasiada confianza. Eva María Díaz Martínez concibe un gobierno para el bien que exige un constante ejemplo de las virtudes por parte del rey y del privado. [...]

[...] Y veremos también como este panfleto precursor aparece como la primera etapa en el proceso de institucionalización de la figura del valido. Por eso, en una primera parte veremos que la presencia y la ayuda de un perfecto privado son necesaria para el monarca, es la luna al lado del sol. En una segunda parte estudiaremos como ha de ser este perfecto privado, cual es el modelo preconizado. Y por fin analizaremos que la perfección es el medio para conservar la privanza. [...]

[...] Ya en 1539, Antonio de Guevara, en Aviso de privados y doctrina de cortesanos, analiza cuales han ser las virtudes y el origen social del valido y como éste ha de desempeñar su oficio. Pero, fue el Tratado del Perfecto Privado escrito por Pedro Maldonado, el confesor de Lerma, el que propuso una nueva reflexión sobre los fundamentos y la estructura del sistema político de las monarquías personales al fijarse en el tema de los favoritos reales. Escrito, se piensa, en 1609, cuando Maldonado gozaba de la confianza de Lerma, pero nunca publicado, este tratado se presenta como una gran oración (acaba con amen o mejor dicho como unos mandamientos que debe seguir el perfecto privado y ofrece una reflexión estructurada y argumentada. [...]

[...] Esta razón no corre en el privado, cuyo aumento particular de su casa no consiste o depende del común de la Republica declara el autor en el folio cuarto. Cabe recordar que estamos en una sociedad corporativa y estamental, en la que las obligaciones de todo individuo son primera y fundamentalmente hacia su propia casa. Por esta misma razón el privado puede ser movido por malas razones como cito: la envidia, emulaciones, cudicia y ambición y buscar más prosperidad. Y como lo explica Maldonado si el privado busca su propio interés en vez de el del monarca es imposible que sea un perfecto privado: Donde hay mayor razón de interés, es mas difícil hallarse la perfecta amistad Y esto es justamente lo que explica, según Eva María Díaz Martínez, que numerosos tratadistas del siglo 17 insistieron en la educación, la moral o la recta actuación del privado, porque el peligro para ellos no residió tanto en la institución misma del valimiento sino en los abusos de sus representantes. [...]