Ensayo sobre las Abuelas de la Plaza de Mayo. El 30 de abril de 2007, las mujeres que se atrevieron a exigir información sobre sus hijos secuestrados por la dictadura militar argentina celebraron 30 anos de la manifestación que fue emprendida por las Madres de Plaza de Mayo. Querría volver de nuevo sobre estos hechos que marcaron y que afectan los argentinos. Esa herida histórica infligida por la dictadura sigue siendo abierta y los diferentes grupos de presión siguen luchando a favor de los derechos humanos y también para recubrir la dignidad de los desaparecidos y de sus familiares.
[...] Conclusión: Las Madres de Plaza de Mayo surgieron en un decoro de miedo y silencio. Están la prueba que un grupo que por amor a sus hijos desafió al poder y se levantó como testigo y denuncia pública en un país ocupado por las fuerzas militares. De hecho hoy las Madres continúan en la Plaza los jueves para afirmar que sus demandas siguen actuales y están en cada rincón del país donde se las invita, acompañando al pueblo en sus justos reclamos y exigiendo a los gobernantes Verdad y Justicia. [...]
[...] Por suerte, algunas avanzadas en el juicio. Por ejemplo, la anulación de los indultos está a consideración de la Corte Suprema de Justicia, que en junio del 2005 declaró la Obediencia Final Punto leyes con lo que se reactivaron procesos por delitos de represión. Además, ejemplo muy alentador para la continuación de la justicia universal” llego desde Italia. En efecto, el tribunal penal de Roma ha condenado no solo a cadena perpetua cinco ex oficiales de la Marina por la desaparición de tres italianos durante la dictadura argentina, sino con un ano de aislamiento y 100.000 euros de resarcimiento para cada una de las partes civiles. [...]
[...] Para ellos, fue como si la tierra hubiera engullido a sus seres mas queridos. Sufren doble pena: la desaparición y el silencio de las autoridades que no arreglaron la situación de desesperación. Sufrieron una tortura moral veces física cuando fueron arrestados), pero no hay nada peor que el silencio. Hojean diariamente el “catalogo del horror”, aprenden poco a poco el destino de los desaparecidos, imaginan sus gritos, su desesperación. Fueron torturados, tirados al mar, tiroteados en el estadio nacional. Fueron victimas de un plan de aniquilación organizado en sus menores detalles (plan Cóndor). [...]
[...] Sin embargo, aunque los responsables son conocidos, la justicia sufre de un cuello de botella. Y este retraso judicial impide que los distintos casos se juzguen de manera rápida y eficaz. Al contrario, el procedimiento judicial arrastra y la exigencia de justicia va en cámara lenta. La titular de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, admitió con el presidente de Argentina Néstor Kirchner en que hay retraso en la Justicia con respecto a las causas por los derechos humanos”. [...]
[...] Los oponentes a la dictadura fueron perseguidos, torturados, y muchos desaparecieron para siempre. Un plan fue preconcebido no sólo de secuestro de adultos sino también un plan sistemático de apropiación de niños De ahí, la "desaparición" formo parte de la represión política, afectando a 30.000 personas de todas las edades y condiciones sociales, mientras los obreros fueron mucho más perseguidos. En efecto, los obreros eran considerados como los oponentes los más peligrosos porque solían ser comunistas y entonces el desfase entre sus ideas y la política de la junta militar formaban una amenaza por la dictadura. [...]
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