Después de una lectura del poemario "Entrada en materia", uno se da cuenta de que lo importante no es la materia, como nos lleva a indicar el título, sino que es más bien la idea de vacío que preocupa al autor, José Angel Valente. En efecto, el vacío aparece omnisciente en la poesía de este autor, tanto en su evocación angustiada y múltiple como en su voluntad de darle sentido.
Por una parte, podemos observar que del estudio de las ocurrencias de la palabra ?vacío' y sus derivados (adjetivo vacío, verbo vaciar), el significado más frecuente es el de no-ser. Según Valente, la vida del ser humano es ...
[...] la amistad caída o de un nombre vacío” (p.88) la mineral supervivencia del vacío de nada” (p.157) Al principio, el olvido es un abismo en el que se pierde el poeta y luego modo de esperanza', el poeta quiere borrarlo todo, olvidarlo todo, adrede, para volver a empezar y así quizás nunca olvidar. El poema Criptomemorias expresa esta idea. Por fin, el vacío no puede ser si no está rodeado de silencio. A través del silencio se destaca la palabra que no se puede decir. Para el poeta la palabra es vacía ya que no tiene sentido ni significante. Pero a la vez tiene el poder de ‘llenar' como lo veremos más tarde. El silencio, el vacío significa, es decir tiene sentido. [...]
[...] Pero además, su experiencia solitaria la ‘colectiviza' generalizándola al género humano: “estamos solos” (p.81) Ligados a la evocación del vacío, encontramos las imágenes de la ceniza, de la muerte, de la oscuridad, de la ausencia (más precisamente la del amor) y de la nada. En efecto, Valente utiliza frecuentemente los adverbios juntos nunca nadie, nunca nada, etc, para realzar la impresión de vacío. Luego, la noción de vacío viene evocada a través del olvido. La angustia de lo vivido pero ya olvidado. El recuerdo de lo que no se puede recordar despierta en el poeta un sentimiento de vacuidad, de lo vano y efímero de la vida. [...]
[...] Entonces, frente al vacío de la muerte, el poeta erige el poema. El ser humano puede dejar algo de sí cuando se haya unido a la nada. El poema es el símbolo de la perduración en la tierra, después de muerto. Es como una eternidad póstuma en el vacío: no depositamos a mitad del vacío ( ) Cuándo podremos poseer la tierra” El silencio de la frase sin acabar deja patente esta solución de intentar vencer el vacio. El vacío entonces queda por todas partes y aunque el poeta intenta buscarle una materia, un nombre, no dejaría de ver en este vacío todos los sentidos: los sentidos múltiples y diversos de la vida humana. [...]
[...] No descarta totalmente que sea un bello sentimiento pero muy a menudo es la pérdida del amor o el momento después del acto amoroso el que le lleva a su condición de vacío. El amor da ganas de vivir ya que es muy agradable amar y ser amado pero también da ganas de morir al darse cuenta de que tal momento ya no existirá, que se va a diluir en el pasado. Será apenas un recuerdo, lo que representa, para el poeta, como ya lo dijimos, el vacío. Tal evidencia le quita ánimo para seguir viviendo. [...]
[...] De hecho, la mujer es vacío y dando un nombre, un sentido al vacío, da sentido a su vida. Se puede ver esta idea en el poema El Círculo. Desde otro punto de vista, en la obra, volvemos a encontrar la forma círculo/centro. En su búsqueda de nombrar, de sentido, el vacío ya no es mujer sino que es Dios: centro es el vacío” Haciendo referencia a un diccionario de símbolos el círculo puede ser la representación de Dios; un círculo cuyo centro se encuentra por todas partes. [...]
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