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El documento es una creación literaria en forma de entrevista sobre la crítica de arte.
Extracto:
"Buenas noches a todos y bienvenidos en El DebArte, su programa de radio que les propone cada jueves un debate sobre un tema del arte. Soy Manuel Garcia, crítico de arte de Buenos Aires y animaré el debate esa noche.
El asunto del día será la relación entre el arte contemporáneo y la realidad."
[...] Soy Manuel Garcia, crítico de arte de Buenos Aires y animaré el debate esa noche. El asunto del día será la relación entre el arte contemporáneo y la realidad. Más concretamente, investigaremos sobre si el arte contemporáneo está más o menos en sintonía con nuestra realidad que es el arte moderno. Para contestar, contaremos con dos expertas que presentarán sus puntos de vista divergentes. Por un lado, Victoria Noorthoorn, directora del Museo Moderno de Buenos Aires y curadora independiente. Buenas noches, Señora, bienvenida a usted. [...]
[...] Yendo al grano MG El placer de acogerla es nuestro. Usted optó por defender la opinión de que el arte contemporáneo se ajusta más a nuestra realidad que es el arte moderno. Primero, hay que contextualizar los periodos artísticos. Cuando se habla de arte moderno, se refiere a todo el arte desde la Revolución industrial hasta el fin de la Segunda Guerra Mundial, más o menos entre la mitad de los años 1850 y la mitad de los años 1940. [...]
[...] VN Muy bien, pero el tema del cuadro sigue siendo el color. aunque sea real, ¿puede este color en sí mismo estar relacionado con nuestra realidad? No lo creo. El neodadá MG Bueno, gracias por sus opiniones, señoras. Pasemos al siguiente tema, el neodadá. Es el movimiento contrario al expresionismo abstracto que emergió como réplica a éste en Nueva York a finales de la década de 1950. Tiene su origen en el movimiento dadaísta de principios del siglo XX. Sra. Baldasarre, ¿qué puede contarnos de este movimiento? [...]
[...] Sin embargo, se puede contrastar con el movimiento dadaísta en la vida cotidiana. Ser Dadá era una forma de vida, un estado de ánimo. Los artistas dadaístas eran rebeldes declarados que se negaban a adaptarse no sólo a las convenciones artísticas sino también a las sociales. Fue un movimiento que afectó a todas las formas de arte del mundo con el objetivo de denunciar la hipocresía de los valores establecidos en un momento en que los horrores de la Primera Guerra Mundial mostraban sus defectos. [...]
[...] El objetivo es privilegiar el acto físico de pintar sobre la obra en sí. El artista, el ser humano, se convierte así en el sujeto principal de la obra de arte. VN Es cierto, pero el propio movimiento se basa en algo que no es concreto, el instinto y el pensamiento del artista. Tomando el ejemplo de Jackson Pollock, artista estadounidense y figura destacada del movimiento, él mismo dijo sobre su proceso creativo "Cuando estoy en mi pintura, no soy consciente de lo que estoy haciendo. [...]
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