El Movimiento Muralista es el fenómeno artístico de mayor importancia del arte mexicano del siglo XX. Termina en 1955 cuando perdió fuerza como movimiento artístico. El muralismo se define como un arte pictural figurativo que exprime en el espacio público un contenido ideológico popular. Puede definirse como un fenómeno de “lucha de las clases”.
Nacimiento del muralismo
Podemos destacar dos periodos en la historia del arte mexicano: una, colonial, ante 1810, y otra moderna. Era en 1910 cuando Murillo estableció los criterios de una expresión pictural nueva que debía mostrar el patrimonio cultural pre-colombiano. Este arte popular mexicano rechaza la pintura dicha “de salón”. Murillo habla de un arte socialmente orientado que exhibe la realidad diaria.
En los años 1920, el ministro de la educación José Vasconcelos promueve un programa cultural al cual va a vincular el pintor Diego Rivera, que viajó en Europa. José Vasconcelos organiza un viaje en el Yucatán, en sitios arqueológicos para que los artistas se acerquen del patrimonio artístico mexicano. En 1922, saliendo de una opresión hispánica y cristiana, el estado se estabiliza y realiza un gran movimiento de pedidas de pinturas murales. El ministro decide sostener la población indígena para la igualdad social y racial, y ayudar el país para crear un nuevo vínculo con sus raíces culturales. Con los sindicatos de pintores, escultores revolucionarios nace el muralismo.
“Los muros deben ser como libros”
Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros, José Clemente Orozco y Rufino Tamayo están los principales actores. El arte que quieren desarrollar es un verdadero movimiento político revolucionario descrito en un manifestó: el arte al servicio del pueblo y de sus reivindicaciones sociales. Debe educar las masas, dándoles un mensaje fácilmente decriptable, como un regreso a la fuente y una posibilidad de progreso. Se destacan dos temas dominantes: la tradición pre-colombiana y la lucha de las clases marxistas. El muralismo es el símbolo de la modernidad mexicana. Al concluir la fase armada de la Revolución, surgió la inminente necesidad de generar una imagen en torno a la cual pudiera cohesionarse la heterogénea sociedad mexicana.
La relación entre artistas y patrocinadores fue motivo de fricciones, lo cual se tradujo en más de una ocasión en censura, llegando hasta la destrucción de obras. En el principio, hay una oposición entre el régimen político mexicano y los pintores muralistas, que va alejarles en los EE.UU. Esto va permitir al muralismo extenderse en toda América Latina, conocido gracias al Presidente chileno Salvador Allende, que lo sostiene. Además, los símbolos de este movimiento son fáciles que interpretar, y van a imprimirse en la mente popular del mundo.
[...] Diego Rivera Diego Rivera se interesó ampliamente por los orígenes de la Historia mexicana. Idealiza el pasado indígena y desde el punto de vista de su obra fue muy armonioso .Su obra tiene un gran colorido y el México marginal también tiene una grande importancia: el pueblo, los trabajadores, los mercados que hacen contraste con las clases altas que pueden vivir en la opulencia. Pues los dos temas del muralismo están presentes en sus obras. Por ejemplo en el fresco consagrado a la distribución de los ejidos, Diego Rivera ilustra el doble componente de la identidad mexicana; la revolución y la reforma agraria por el tema elegido; el estatuto de indígena por el modo de representación: elige la ausencia de perspectivas, figuras masivas y rígidas que caracterizan el arte maya y azteca. [...]
[...] Permite a Frida Kahlo inscribirse de manera justificada en el arte mexicano. Por ejemplo, una tela que concierne la maternidad es el retrato de la niñera de Frida Kahlo, amamantándola. La mujer al rostro escondido hace referencia a una diosa azteca, Coatlicue, madre del dios y la diosa de la Tierra. Frida utiliza elementos de su vida (sus abortos naturales) para pintar sujetos mexicanos. Porque Frida Kahlo pinta sobre todo cuadros que representan su propia vida, su influenza sobre el muralismo se halla disminuida. [...]
[...] La evolución positiva es el hecho de que alcanzó su meta, desarrollando el arte mexicano y sensibilizando las masas a la política. La evolución negativa es vinculada con la orientación política de los artistas muralistas, que eran comunistas. Cuando el partido revolucionario instituyó su poder dictatorial, tuvo un control total sobre todas las estructuras. Si al principio el muralismo permitió a los comunistas transmitir sus ideas, después sus ideas políticas fueron percibidas como una traba a la evolución del país, lo que fue un freno para ellos. Eso puede explicar que Rivera y su esposa se van en los EE.UU. [...]
[...] La influencia real de la pareja Kahlo Rivera sobre el movimiento muralista mexicano 1. El movimiento muralista en México El Movimiento Muralista es el fenómeno artístico de mayor importancia del arte mexicano del siglo XX. Termina en 1955 cuando perdió fuerza como movimiento artístico. El muralismo se define como un arte pictural figurativo que exprime en el espacio público un contenido ideológico popular. Puede definirse como un fenómeno de “lucha de las clases”. Nacimiento del muralismo Podemos destacar dos periodos en la historia del arte mexicano: una, colonial, ante 1810, y otra moderna. [...]
[...] En esta medida, se puede decir que la pintura de Frida sigue la misma meta que la del muralismo: se puede describir como un himno al México, a sus clases bajas, y a su folclore. Frida atribuya mucha importancia a su país natal, lo que era visible en su pintura. Este cuadro contiene diversos elementos de la mitología del México antiguo: la dualidad del día y de la noche, del sol y de la luna, la divinidad de la tierra Cihuacoatl y la del inframundo Xólotl. [...]
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