Sieyès, con su obra inaugura, en cierta medida, los escritos revolucionarios que inician la Revolución francesa de 1789.
Elaboró una nueva teoría de la representación política y, en relación con ello, la definición de un nuevo concepto de Constitución.
Vicario general de Chartres, fue diputado del Estado Llano en París, donde consiguió hacer triunfar la verificación entre los tres Estados de los poderes (10 junio 1789) y la adopción del término de Asamblea Nacional (17 junio); participó en la redacción del juramento del Juego de Pelota (20 junio) -juramento por el cual se proclama que la Asamblea Nacional permanecerá reunida “hasta que la Constitución del reino quede instaurada y consolidada sobre sólidos cimientos”. Junto a Mirabeau, se opuso al intento de la Corte de suprimir la Asamblea (23 junio).
[...] En sus escritos, Sieyès se niega a apelar a la tradición, al precedente histórico. Su argumentación se basa en el discurso de la razón sobre la sociedad. Pero también apela al discurso de la voluntad, según el cual nación existe antes que todo. Su voluntad es siempre legal, ella es la ley misma”, invitando a una afirmación de la voluntad política que se desliga completamente de la historia. El espíritu de Sieyès se caracteriza, pues, por su sesgo antihistórico y racionalista. [...]
[...] En los primeros meses de 1789, S. había lanzado la consigna: “¡Únicamente el Tercer Estado compondría una Asamblea nacional!”. Y el 17 de junio de 1789, bajo su 3 impulso, efectivamente se proclamó la Asamblea nacional; asamblea que, muy pronto, agregó a su título el de Constituyente. Enseguida, la Declaración de los Derechos del hombre y del ciudadano enunciaría y reconocería textualmente que: principio de toda soberanía reside esencialmente en la nación”. Con ello, se daba el golpe de gracia a la Monarquía absoluta. [...]
[...] En 1816 fue desterrado como regicida, y no volvió a Francia hasta 1830. Sus dos principales obras son: Ensayo sobre los privilegios (noviembre de 1788) la más conocida, ¿Qué es el Tercer Estado? (Qu'est-ce que le Tiers État?) (aparece en los primeros días de páginas), junto con una tercera obra Vues sur les moyens d'exécution dont les représentants de la France pourront disposer en 1789 (verano de 1788) –Puntos de vista sobre los medios de ejecución de los que los representantes de Francia podrán disponer en 1789). [...]
[...] Emmanuel Joseph Sieyés, el Abate (1748-1836) SIEYÉS, el Abate (Emmanuel Joseph) (1748-1836) Sieyès, con su obra inaugura, en cierta medida, los escritos revolucionarios que inician la Revolución francesa de 1789. Elaboró una nueva teoría de la representación política en relación con ello, la definición de un nuevo concepto de Constitución. Vicario general de Chartres, fue diputado del Estado Llano en París, donde consiguió hacer triunfar la verificación entre los tres Estados de los poderes (10 junio 1789) y la adopción del término de Asamblea Nacional (17 junio); participó en la redacción del juramento del Juego de Pelota (20 junio) -juramento por el cual se proclama que la Asamblea Nacional permanecerá reunida “hasta que la Constitución del reino quede instaurada y consolidada sobre sólidos cimientos”. [...]
[...] En el capítulo 5º de su obra el Tercer Estado, elabora la conocida teoría del poder constituyente, base de una nueva concepción de la representación política, a partir del rechazo de la tradición histórica estamental. La nación, “origen de depositaria de la soberanía, debía dotarse de una Constitución mediante la delegación de la soberanía en unos representantes extraordinarios. El cuerpo representativo de la nación era e indivisible”. “Todo diputado es representante de la nación entera”. Sieyès se negaba a aceptar que las antiguas leyes del Reino fueran una auténtica Constitución. Constitución –para él- será una norma superior de naturaleza diferente a las normas ordinarias, obra exclusiva del poder constituyente. [...]
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