Ce document en espagnol expose selin un plan chronologique les grands axes de la politique uruguayenne de 1833 à 1852.
Extrait :
"La intensidad diplomática de los gobiernos provisionales continuó en las primeras presidencias de Rivera y Oribe. Durante estos años, una sucesión de comisiones hacia el exterior darán el perfil de los problemas e intereses que mueven a la Republica en los albores de su vida internacional: el haber nacido con un estatuto impreciso, el soportar la mala voluntad de sus signatarios en definir el tratado de paz y la fijación de limites con ellos, la necesidad de conectarse con los grandes centros de poder europeos para afirmar su soberanía y desarrollar su comercio.
Junto a las misiones diplomáticas va a darse la apertura de consulados, necesarios por la magnitud del tráfico canalizado por el puerto y del movimiento inmigratorio. A partir de 1828 se empiezan a reconocer cónsules extranjeros. El primer cónsul acreditado fue Antonio de Oliveira Campos, en Brasil en 1832. En 1840, el país ya cuenta con representaciones consulares instaladas en los principales puertos europeos así como en Nueva York y Porto Alegre.
El papel de los cónsules será decisivo para la política comercial e inmigratoria (que se vuelve liberal luego de 1861)."
[...] En 1834, Obes es llamado para ponerse al frente de la diplomacia uruguaya. El Plan Obes y la misión Muñoz (1834) Obes decide entonces enviar a Francisco Muñoz en misión confidencial a Bolivia, continuando al Perú y Colombia. El objetivo era concertar la voluntad de los vecinos fronterizos del Imperio - la mayoría de los cuales tenían pendiente la determinación de sus fronteras con el Brasil-, para negociar en forma conjunta los límites respectivos de cada uno de ellos. Una discusión colectiva tendría mas fuerza y permitiría llegar a un acuerdo más sólido, favoreciendo a todos los vecinos del Imperio. [...]
[...] El objetivo principal es provocar la intervención británica, junto con Francia o por si sola, en el Río de la Plata para terminar de forma rápida y definitiva con la guerra, cuidando siempre la independencia oriental. Adicionalmente, Varela debía señalar a GB las ventajas para el comercio británico de contar con el puerto de Montevideo, superior al de Bs.As. y otros puertos argentinos; debía expresar que el gobierno de la Defensa, a la inversa del gobierno argentino, era partidario de la libre navegación de los ríos afluentes del Plata. También explicaría la influencia negativa del ejercito rosista en el Uruguay, al que le quitaba recursos y prosperidades. [...]
[...] Misión de Obes a Londres (1833) Esta misión, que no se llegó a cumplir, tendría como fin: informar a Inglaterra de la conducta “equivoca e indecisa” que estaban teniendo Argentina y Brasil con respecto al futuro de la Banda Oriental; recordarle los motivos de interés común a toda America que la habían inducido a proponer la creación de un Estado soberano independiente; solicitar su mediación en la elaboración del tratado definitivo; lograr un tratado de comercio con Inglaterra. Esto llevaría a que la potencia garantizara los derechos de la Republica contra las agresiones de sus vecinos. También, Lucas Obes debía pasar por Río de Janeiro a reclamar por las infracciones del derecho internacional e insistir con la concurrencia de un ministro de la Banda Oriental en la celebración del tratado ulterior. [...]
[...] Esto lleva al apoyo de Francia a Rivera, que ya contaba con el de los unitarios y los farrapos. Esta coalición derrota a Oribe en octubre de 1838, quien se retira a Bs.As. y entra al servicio de Rosas, quien lo apoya para que pueda recuperar su poder legal. Así es que en 1839, el ejercito rosista (al mando de Echagüe) invade el territorio uruguayo. La flota francesa envía hombres en ayuda a Rivera, ahora presidente. Las tropas argentinas son derrotadas en Cagancha y se retiran del Uruguay. [...]
[...] Al mismo tiempo, otras negociaciones políticas reservadas se desarrollaban en Montevideo con el representante del Imperio, Almeida de Vasconsellos. En ese momento, el Brasil se veía sacudido por muchas convulsiones que promovían las pasiones locales (por ejemplo el grupo revolucionario Farrapos”). Vasconsellos tenía como objetivo negociar un tratado de alianza ofensiva y defensiva entre Basil y Uruguay, importante y urgente para ambos ya que permitiría contener por mano armada los elementos revolucionarios que amenazaban perturbar la tranquilidad de sus respectivos gobiernos. [...]
Source aux normes APA
Pour votre bibliographieLecture en ligne
avec notre liseuse dédiée !Contenu vérifié
par notre comité de lecture